El alto el fuego promovido por Estados Unidos entre Irán e Israel fue violado por ambas partes, según confirmó el presidente Donald Trump. Aunque se anunció el cese de hostilidades, ataques continuaron tras la hora límite. “No estoy contento con Israel”, declaró el mandatario en la Casa Blanca.
Israel aseguró haber lanzado bombardeos tras una violación iraní, mientras que Teherán negó los disparos y acusó a Tel Aviv de extender la ofensiva. Ambos países reclaman victoria: Israel dice haber cumplido su objetivo militar y la Guardia Revolucionaria afirma haber obligado a su enemigo a detener la guerra.
El conflicto ha dejado al menos 610 muertos en Irán y 28 en Israel, según cifras oficiales. Trump pidió calma y dijo que los aviones israelíes “volverán a casa”. Qatar habría persuadido a Irán para aceptar la tregua. La comunidad internacional teme un nuevo colapso del frágil acuerdo.