La renovación del Poder Judicial representa, para mineros en huelga desde hace 18 años, una oportunidad concreta para que se haga justicia. Desde 2007, trabajadores de la mina San Martín en Sombrerete, Zacatecas, han sostenido una lucha por condiciones seguras y derechos laborales básicos. Hoy, exigen que el nuevo contexto institucional reabra el caso con imparcialidad y voluntad.
Mientras tanto, dirigentes sindicales y sociales recordaron que la huelga sigue vigente y legal. Criticaron que, pese a los discursos de justicia social, ni la Secretaría del Trabajo ni la Secretaría de Economía han ofrecido soluciones reales. Además, señalan que el caso es el único conflicto laboral del T-MEC sin resolución favorable para los trabajadores.
A lo largo de los años, 31 mineros han muerto en accidentes dentro de la unidad. Por ello, organizaciones como el FSSP y el SNTE han llamado a unificar las luchas sociales del país. Se plantea que el Plan Nacional de Desarrollo debe construirse desde las voces obreras y campesinas, no desde escritorios tecnócratas que “quieren quedar bien con todos”.
Finalmente, los mineros insistieron en que esta huelga no es por salario, sino por dignidad. Aseguran que el respaldo de otras secciones sindicales es constante, tanto en lo moral como en lo económico. “No le dimos el gusto a la empresa”, dijo un trabajador. Ahora, con un nuevo Poder Judicial, exigen que la historia no los vuelva a dejar atrás.