Durante la cumbre del G7 en Canadá, Donald Trump defendió la reincorporación de Rusia al bloque, criticando su expulsión tras la anexión de Crimea en 2014. Afirmó que “fue un error” excluir a Moscú y culpó a Obama y Trudeau, aunque el mandatario canadiense en ese momento fue Stephen Harper.
Trump declaró que Vladimir Putin “sólo habla conmigo” y sostuvo que su permanencia en el grupo habría evitado la guerra en Ucrania. Reiteró su respaldo al líder ruso y comparó la exclusión con una ofensa personal. La propuesta generó malestar entre los aliados, como ya ocurrió en 2018.
El mandatario estadounidense abandonará anticipadamente la cumbre para atender el conflicto entre Israel e Irán. Antes de partir, señaló estar abierto a que Putin actúe como mediador en Medio Oriente. Las declaraciones se producen un día antes de reunirse con Volodímir Zelenski, a quien ha cuestionado por prolongar la guerra con Rusia.