El gobierno de Estados Unidos anunció la mayor incautación de precursores químicos en su historia: 316 mil kilos valuados en 568 millones de dólares. Según el Servicio de Migración y Control de Aduanas (ICE), los cargamentos provenían de China y tenían como destino al Cártel de Sinaloa. El decomiso se realizó en alta mar en el marco de la “Operación Hydra”.
Las autoridades concentraron el material en Panamá antes de trasladarlo al puerto de Houston. En la conferencia, la fiscal federal Jeanine Pirro y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza calificaron al Cártel de Sinaloa como uno de los grupos criminales “más violentos y brutales en la historia”, responsable de miles de muertes en Estados Unidos.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, confirmó que la operación forma parte de la estrategia de Trump contra el narcotráfico. “Estamos cumpliendo la promesa de frenar a los cárteles”, señaló al informar sobre el golpe contra las redes de tráfico químico.