La administración estatal reactivó investigaciones contra el exgobernador Miguel Alonso Reyes por presunto enriquecimiento ilícito, aumento de deuda pública y el déficit en la nómina educativa. La Fiscalía de Justicia confirmó que existe una carpeta abierta desde 2018.
El exmandatario negó las acusaciones, atribuyéndolas a fines políticos. Afirmó que los empréstitos contratados financiaron obras como Ciudad Administrativa y defendió sus gestiones en seguridad y federalización educativa. El secretario de Gobierno, Rodrigo Reyes, aseguró que la investigación no es personal sino administrativa.
Ernesto González, titular de la Función Pública, reveló que el patrimonio del exgobernador creció de forma inexplicable: pasó de 4.2 a 21.4 millones de pesos entre 2010 y 2016, con 17 millones sin justificación aparente. Autoridades estatales insistieron en que los zacatecanos aún enfrentan las consecuencias financieras de ese sexenio, con una deuda actual de más de seis mil millones de pesos. La investigación continúa en curso.