La Secretaría de Desarrollo Social estatal (Sedesol) accedió a revisar las solicitudes de la organización Antorcha Campesina, que pidió atención para obras públicas en comunidades marginadas. La reunión fue encabezada por su líder, Osvaldo Ávila Tiscareño.
Ávila aclaró que no buscan apoyos directos para la organización, sino que se atienda a ciudadanos organizados. “No queremos que se nos entregue a nosotros, sino que se atienda a quienes representamos”, enfatizó. Consideró el encuentro como un posible punto de partida para avanzar en soluciones concretas.
Benelly Hernández, titular de Sedesol, reiteró que su política rechaza la entrega de recursos a través de agrupaciones. Afirmó que la dependencia mantiene las puertas abiertas al diálogo, pero prioriza atender directamente a la ciudadanía.
Aunque no se anunciaron compromisos firmes, ambas partes mostraron disposición al diálogo. El caso reabre el debate sobre los límites legales y políticos de la mediación social, y la necesidad de atender demandas colectivas sin caer en intermediación partidista o clientelar.