Un avión Antonov An-24 con cerca de 50 personas a bordo se estrelló este jueves en la región de Amur, en el Extremo Oriente ruso. Autoridades confirmaron que no hubo supervivientes. El fuselaje fue localizado a 16 kilómetros de Tinda, en una zona boscosa y de difícil acceso.
El aparato intentaba aterrizar por segunda vez cuando perdió contacto con la torre. Viajaba entre Blagoveshchensk y Tinda con 46 a 49 personas, incluidos dos niños y seis tripulantes. Entre las víctimas hay cinco empleados de los ferrocarriles rusos y un ciudadano chino. Xi Jinping expresó condolencias a Vladimir Putin.
El avión, operado por Angara Airlines, fue fabricado en 1976 y renovado para operar hasta 2036. El Comité de Investigación ruso indaga posibles fallas normativas. En la región, donde los accidentes aéreos son frecuentes por las vastas distancias y el terreno, fueron desplegados más de 150 rescatistas para atender la emergencia.