La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo envió a la Cámara de Diputados una iniciativa de reforma a la Ley Orgánica de la Armada de México que amplía sus atribuciones en materia de persecución en altamar, ciberseguridad y uso de inteligencia artificial. El proyecto plantea que la institución participe en la defensa ante amenazas a la seguridad nacional tanto en el mar como en el ciberespacio.
La propuesta también elimina del artículo 2 el párrafo que ordena cooperar “con estricto respeto y protección de los derechos humanos”. En su lugar, se incorpora la responsabilidad de ejecutar políticas de defensa instruidas por el mando supremo y el empleo del poder naval frente a escenarios de riesgo, incluyendo combate al terrorismo, piratería, contrabando y tráfico ilegal.
De aprobarse, la reforma facultaría a la Armada para ejercer funciones de guardia costera, realizar inspecciones, proteger instalaciones estratégicas y conducir operaciones de ciberdefensa. El documento subraya que la institución mantendrá control sobre el tráfico marítimo y los espacios aéreos correspondientes, coordinándose con otras autoridades para garantizar la seguridad nacional.